sábado, 31 de julio de 2010

Capitulo 8

Supongo que ya es hora de que os cuente lo que pasó con Ashton. Para empezar, tenéis que saber que yo jamás he amado a alguien tanto como le amé a él. Desde los 8 años, sí, desde los 8, llevaba enamorada de él. Eramos muy buenos amigos, pasabamos el día juntos, él no sabía lo que yo sentía por él. Con 11 años, me atreví y se lo dije. Él no dijo nada al respecto, y seguimos siendo amigos durante un tiempo. Hasta que fuimos creciendo. Entonces, sus 'amigos' le decían que yo era una mala compañía, que se tenía que buscar a alguien mejor. Yo seguía colada por él. Con 13 años, me dijo lo que jamás hubiera deseado oir. Me dijo que pasaba de mí, que estaba loca (sí, loca por amor...), que no quería volver a verme nunca más, que no le hablara más, que no me acercara a él. Y yo no había hecho absolutamente nada, sólo me había enamorado de él. Lo pasé fatal. Fueron los peores años de mi vida, no se puede explicar con palabras. No nos podíamos ni ver. Me pasé noches enteras llorando, faltaba a clase porque no podía ni verle, le escribí millones de canciones. Le echaba de menos, pero le odiaba al mismo tiempo. Se mudó a Londres cuando teníamos 15 años. Ahí fue cuando las cosas empezaron a ir bien otra vez. Tuve algunos novios y poco a poco le fui olvidando. Por fin podía sonreir. Y ahora, dos años después, cuando ya me había alejado completamente de todo lo que tenía que ver con él, vuelve. Y yo no estaba dispuesta a pasar por lo mismo que pasé. No, no tenía miedo de volverme a enamorar de él, después de todo lo que me hizo jamás le querría otra vez. Sólo tenía miedo de recordar momentos, amargarme y desaprovechar mis vacaciones. Por eso, sin dudarlo, me fui a casa de Dougie y compañía. Me estaba enamorando de Doug, y, al parecer, él de mí también. Estaba clara cual era mi misión: No pensar en el estúpido que jodió mi niñez y vivir la vida al 100%.
- Buenos días, mi party girl - me dijo Dougie mientras me despertaba.
- Buenos días, mi... party boy? - me reí y me levanté.
Dougie salió de la habitación, contesté al sms que me enviaron mis padres para preguntarme cómo estaba, y fui hacia la ducha. Al entrar, estaba Doug, con una toalla en la cintura y sin camiseta, afeitandose.
- Ops, lo siento - dije mientras cerraba la puerta riendome.
- No pasa nada, entra, no molestas - dijo riendose mientras me guiñaba un ojo.
- Iba a ducharme - dije asomando mi cabeza por la puerta.
- Por eso, no importa, entra entra - dijo mientras levantaba las cejas. Entré riendome y le pegué en la barriga. Me agarró de la cintura y me besó en la frente.
- Tonto - le dije dandole un beso en la nariz.
- Tonto? un tonto no haría esto - me besó. Sonreí. Dougie era perfecto, perfecto para mí. Me cogió en brazos y me metió en la ducha. Él se metió detrás de mí. Yo tenía la ropa puesta, él se quitó la toalla y estaba en calzoncillos. asdlfkajsdfklurebuioskajsdhfas. Encendió la ducha y nos empezamos a mojar. Parecía la escena de cualquier película de amor. Risas. Besos. Diría que había sido la mejor ducha de mi vida. Me fui a la habitación a cambiarme la ropa mojada, y él se fue a desayunar. Oh dios, realmente quería a Doug.
Ese día fui a ver a los chicos ensayar. Eran muy buenos, me encantaban todas las canciones del nuevo disco, eran mejor de lo que pensaba. Cuando tocaron ''I'll be your man'', me quedé de piedra. Era la mejor canción que jamás había escuchado. Y Dougie no paraba de mirarme y sonreirme mientras la tocaban. Fue un día genial.
- Y bueno, ¿cuando vais a decirnos que estáis juntos? - nos dijo Danny cuando ibamos en el coche camino a casa.
- Cuando dejes de gritar tanto al 'hacerlo' con Georgia - dijo Dougie riendose. Yo no pude evitar reirme. Efectivamente, sólo había pasado una noche en esa casa y ya les había oido en 'acción'.
- Tss! - dijo Danny con su típica sonrisa picarona.
Al llegar a casa, me fui a mi habitación y me conecté al tuenti. Tenía un mensaje privado de un tal llamado ''Anónimo''. El mensaje decía ''Asómate por la ventana, y escucha lo que te voy a decir, por favor''. Me daba miedo asomarme. Esperé cinco minutos, y entonces me asomé. Mierda. Ahí estaba el cabrón.
- Nelly, sabía que preferirías al famosillo antes que a una persona como yo, siempre ha sido así, pero he cambiado de... - cerré la ventana de golpe y bajé la persiana.
No quería escuchar la voz de ese estúpido. ¿Qué se suponía que estaba haciendo? ¿Pedirme perdón? ¿Después de tanto tiempo? Anda venga, que se vaya con su Savannah y me deje en paz. Arrrrrrrrg que asco me daba el pobre.
Entonces entró Dougie, y de repente se me fue el mar humor. Ese chico hacía milagros, de verdad. Estuvimos hablando (entre otras cosas... no penséis mal eeh...) un rato, y después nos fuimos a dormir. En mitad de la noche, se levantó y se metió en mi cama. Dormimos abrazados el resto de la noche. Eso si que era amor, joder.

Capitulo 7

¿Qué hacía ese en nuestro apartamento? ¿Qué hacía ese en Londres? No, por favor. Preferiría irme a Bilbao otra vez antes que estar en Londres con ese. Estúpido. Con lo feliz que estaba yo, sin él, ahí, alejada de todo lo que tenía que ver con él... Me acerqué a él, estaba hablando con Savannah, en el sofá.
- ¿Qué haces tú aquí? - le dije con desprecio.
- Mejor dicho, ¿qué haces tú aquí? - me contestó con chulería.
- Bueno, pues... este es nuestro apartamento y tal... creo que es lógico que esté aquí - le sonreí falsamente.
- Vale, pues yo estoy saliendo con Savannah, asi que creo que tengo el derecho de venir, además, ella me ha invitado a quedarme unos días aquí, y no tenía ni idea de que estarías aquí.
- ¡¿Qué?! Estáis saliendo..? haha Savannah nunca caería tan bajo - le contesté.
- Pues es verdad, Nelly, y si te molesta, te aguantas - me contestó ella.
Me fui a mi habitación corriendo, y me tumbé en la cama a pensar. Yo no podía estar en el mismo apartamento que él más de 3 días. Y se iba a quedar una semana. Acabaríamos matandonos. Sin pensarmelo dos veces, pedí permiso a mis padres para irme a pasar la semana a casa de 'una amiga' que vivía en Londres. Aceptaron. Obviamente, no era ninguna 'amiga'. Eran ellos, mis cuatro chicos favoritos, que me dejaban quedarme con ellos una semana. Preparé la maleta esa misma noche, y me fui sin despedirme de ninguno de los dos. Savannah me había decepcionado. Ella sabía perfectamente que la dejaría salir con cualquier chico del mundo, cualquiera menos Ashton. Y él, en fin... él sólo había venido a joder, estaba claro. Cogí el autobús hacia la casa de los chicos. Cuando llegué, estaba Dougie en la puerta.
- ¿Qué ha pasado? - me preguntó mientras me abrazaba.
- Nada, que una persona ha venido a pasar una semana a nuestro apartamento... y no me apetece estar a menos de 10 metros de él - dije intentando sonreir.
- Oh, pues no te preocupes, aquí te cuidaremos - me dió un beso en la mejilla.
Entramos a la casa. Eran las 11, estaba cansada y quería dormir. Dougie puso una cama supletoria en su habitación. Me llevó hasta su cuarto y me enseñó donde estaba el baño. Me puse el pijama, y me metí a la cama. Al de 10 minutos, Dougie llegó y se metió en su cama silenciosamente. Yo seguía despierta.
- Doug... gracias por todo, te quiero - le dije.
- De nada Nelly, yo también te quiero - me dijo mientras suspiraba.
- ¿Qué pasa? - pregunté, parecía preocupado.
- Nada, es que me gustaría que supieras una cosa antes de que.. - paró de hablar.
- ¿Antes de... qué? - pregunté extrañada.
- Antes de que me enamore de tí - susurró.
- ¿Enamorarte?...bueno, y qué es lo que tengo que saber? - Doug acababa de decir que se estaba enamorando de mí? Wow.
- Que... en realidad, no te desmayaste en el concierto.
- ¿Qué?
- Yo soy el único que sabe lo que te pasó de verdad... - dijo mientras salía de su cama y se sentaba en la mía.
- ¿Y qué me paso? - pregunté mirandole fijamente.
- Bueno, saliste del concierto y al parecer nadie vino a buscarte... no tenías ni dinero, ni saldo, entonces yo te ví y me ofrecí a llevarte a casa en mi coche...
- ¡Espera! ¡Eso es lo que soñé yo! - no me lo podía creer.
- ¿Lo soñaste?
- Bueno, me desperté en el hospital y dí por hecho que fue un sueño...
- Pues no lo era. ¿Y qué más pasaba en tu 'sueño?
- No recuerdo nada más, cuando me iba a meter en tu coche me desperté.
- ¿Quieres que te cuente lo que pasó?
- Sí... por favor - tenía miedo. Bajó su mirada. ¿Qué me habría pasado? ¡Tan malo no podía ser...!
- Bueno, esa noche tuvimos un accidente de coche. A mi no me pasó nada. A ti... bueno, no te hicistes heridas, pero te quedaste inconsciente. Yo entré en pánico, admito que había bebido algunas cervezas esa noche con los chicos, y no quería meterme en ningún lío. Asi que, yo mismo, te llevé hasta el Wembley, y me hize pasar por guardia. Llamé a tus padres, y les dije que te habías desmayado en el concierto. Llegaron, y te llevaron al hospital. Por eso cuando el otro día entré en nuestra casa y te ví, me comporté de esa manera... pensaba que lo recordarías. Pensaba que estabas en mi casa por el accidente, que se lo ibas a decir a los demás. Lo siento Nelly, de verdad. - Le abrazé, había sido tan sincero conmigo... Me daba igual que me hubiera quedado inconsciente por su culpa, en ese momento me daba igual todo, o casi todo.
- Gracias por ser así Doug, tan sincero, tan... todo, te quiero - le sonreí y le besé en la mejilla.
- Yo si que te quiero, preciosa - me dió un pequeño beso en los labios y se metió en su cama.
Él me hacía la chica más feliz del mundo. Él conseguía que me olvidara de todo. De todo... bueno, de todo menos Ashton. ¿Qué hacía con Savannah? La iba a acabar haciendo daño. Pero bueno, ellos estaban saliendo, y yo estaba medio-saliendo con Doug. No tenía por qué preocuparme del estúpido de Ashton. Para nada.

viernes, 30 de julio de 2010

Capitulo 6

Me pasaba los días enteros mirando el móvil por si Dougie me llamaba. No tenía el valor de hacerlo yo, no quería molestarle, ni hacerle pensar que sólo era una fan interesada. Asi que, tuve que esperar. Esperar, esperar y esperar. 3 días. Lo sé, no fue mucho, pero se me hizo eterno. Sonó mi movil. ''I've watched his wildest dreams come true, and no one of them involving you...'' Lo cogí rápidamente.
- Doug! - dije.
- Nelly! ¿Qué tal andas? - preguntó.
- Genial, aunque un poco aburrida, haha.
- ¿Qué te parece si te vienes a una playa que está a una hora de Londres con nosotros hoy?
- Oh, me parece perfecto!
- Quedamos a las 12 en la puerta de nuestra casa?
- Ahí estaré - colgé y fui a preparar la mochila. Un día en la playa con mis chicos favoritos... mm, sonaba bien. Savannah no iba a ir, había quedado con un viejo amigo que vivía en Londres. Cogí el autobus hacia la casa de los chicos, llegué en 15 minutos. Dougie estaba afuera, apoyado en el coche. Me acerqué a él.
- Holaaa! - le abrazé.
- Heey Nelly! - me dió un beso en la mejilla y sonrió.
- ¿Donde están los demás? - pregunté mirando alrededor.
- Se han rajado haha
- ¿Enserio? - me reí.
- Sí, así que sólo estamos tu y yo - me guiñó un ojo. ¿Tu y yo? Eso sonaba bien, MUY bien.
- Bueno, así no nos molestarán - dije mientras le guiñaba el ojo tambien.
Nos montamos en el coche, el conduciendo y yo a su lado. Puso música. All Time Low. Nos pasamos todo el viaje cantando, riéndonos y diciendo tonterías. Si Savannah hubiera estado ahí hubiera dicho lo típico de ''Entre vosotros hay feeling''. Cuando llegamos a la playa, cogimos las mochilas y nos fuimos a una duna alejados del mundo. Pusimos las toallas en la arena y nos tumbamos a tomar el sol. Qué bien se estaba ahí. El sol, el mar, el aire, la arena, y... él.
- ¿En qué piensas? - me preguntó de repente.
- En... nada, la verdad - me reí - ¿y tú?
- No sé, qué te parece si vamos a darnos un baño? - preguntó sonriente.
- Perfecto! - me levanté y fui corriendo hacia la orilla. Él me seguía corriendo.
- Te atraparé! - gritaba mientras se reía.
- Nooooo, nunca! - le dije mientras me metía al agua. Empezé a bucear, y él me atrapó.
- Ahora es cuando tú dices que tienes frío y yo te abrazo para calentarte - dijo riéndose.
- Bobo! yo no sigo ningún guión - me reí.
- Pues vaya, yo que quería abrazarte... - puso morritos.
- Haha pues hazlo, pero que sepas que no tengo frío! - reí. Me abrazó. Ais, qué bien se estaba en sus brazos. Me estaba empezando a gustar mucho. Quiero decir, ya me gustaba y tal, pero me gustaba como ''El famoso Dougie''... ahora me gustaba como ''El amigo Dougie''.
Después del baño, fuimos hacia el coche. Eran las 6, y yo había quedado con Savannah a las 7, asi que fuimos hacia casa.
En el coche, tuve un flashback. Era como si ya hubiese estado en ese coche con Dougie antes, y hubiese pasado algo. Pero, como siempre, no le dí importancia. Cuando llegamos a mi casa, nos dimos un par de besos en la mejilla. Nos despedimos, salí del coche y fui hacia la puerta. Cuando la abrí, ví a alguien a quien no esperaba ver, para nada. Ashton. No por favor, Ashton en mi vida otra vez NO. NO NO NO NO NO. Me niego.

Capitulo 5

Pregunté a Tom si le pasaba algo a Dougie. Me dijo que no tenía ni idea, y subió arriba para hablar con él.
- Desde luego, este tío cada día es más raro... - dijo Harry riéndose.
- Viene a casa y ni saluda... - dijo Danny mientras me miraba.
Tom bajó. Estaba extrañado.
- No quiere hablar conmigo. Está muy raro, nervioso.
- ¿Quieres que hable con él? - preguntó Harry.
- No, no quiere hablar con ninguno de vosotros... quiere hablar con ella - dijo señalandome.
¿Qué? ¿Conmigo? ¿Dougie Lee Poynter quería hablar conmigo? ¿De qué? ¿Por qué? No entendía nada. Pregunté a Tom dónde estaba, y me dijo que estaba en su cuarto, arriba a la derecha. Subí y tenía la puerta cerrada. Llamé y pregunté:
- ¿Puedo pasar? Me ha dicho Tom que quieres hablar conmigo - dije tímidamente.
- Sí, sí, pasa por favor - dijo él desde adentro.
Entré y estaba sentado en su cama. Parecía preocupado (aún así, estaba guapísimo, obviamente). Me dijo que cerrara la puerta al pasar, y la cerré.
- Siéntate - dijo seriamente. Me senté a su lado.
- Creo que te estás equivocando de persona, yo no te he hecho nada... - dije mirando al suelo.
- No, no, ya sé que no has hecho nada, sólo quiero preguntarte unas cosas.
- Oh, vale... ¿qué quieres saber? - pregunté extrañada.
- ¿Estuviste en el concierto gratis que dimos hace dos días, no?
- Sí, estuve.
- ¿Y qué hicistes cuando acabó el concierto?
- Bueno, me desmayé antes de que acabara el concierto y me tuvieron que llevar al hospital...
- Oh, vaya, lo siento... no lo sabía - dijo. Parecía que ya no estaba preocupado.
- ¿Por qué lo querías saber?
- Nah, tenía curiosidad - miró hacia abajo.
- ¿Y por qué estabas tan preocupado?
- ¿Yo.. preocupado? No, no lo estaba - me sonrió.
- Bueno, voy a bajar abajo... no voy a dejar a mi amiga sola con esos tres locos - me reí y me levanté.
- Voy contigo - se levantó y me abrió la puerta de su habitación.
¿Por qué me había hecho esas preguntas tan raras? Bueno, parecía que ya no estaba preocupado, asi que no le dí importancia. Bajamos a la sala, y ahí estaban todos, hablando con Savannah.
- Hey! - dijimos Doug y yo mientras no sentabamos en el sofá que estaba libre.
- Holaa de nuevo! - dijeron los demás mientras nos miraban con cara de ''estos planean algo''.
Nos pasamos toda la tarde riéndonos y viendo la tele. Eran chicos muy graciosos, y majísimos. Giovanna y Georgia eran muy simpáticas tambíen.
- Nelly, son las 9, deberíamos irnos a casa - me dijo Savannah.
- Cierto, si no mis padres empezarán a preocuparse - reí.
- Podéis quedaros a dormir aquí si queréis! - nos dijo Danny sonriente.
- Oh, no, mis padres jamás nos dejarían quedarnos a dormir en casas de ''desconocidos'' - sonreí.
- ¿Somos desconocidos? - me preguntó Dougie riendose.
- No, para nosotras no, pero para ellos sí... haha
- Bueno, pues otro día será - dijo Harry.
Savannah y yo fuimos hacia la puerta. Tom nos la abrió. Nos despedimos de todos, y fuimos hacia el autobús. De repente Doug me llamó desde la puerta.
- ¿Sí? - le pregunté mientras retrocedía hacia la casa otra vez.
- ¿Nos veremos, no? - dijo sonriente.
- Claro, eso no lo dudes! - contesté y me di la vuelta otra vez.
Al de 20 segundos, me volvió a llamar. Me reí y me dí la vuelta otra vez.
- ¿Qué quiere ahora el señorito Poynter? - pregunté riendome.
- ¿Me das tu número de móvil? - dijo mientras me daba su móvil para que lo apuntase. Se lo dí y me sonrió.
- ¿Quieres algo más o puedo irme? -reí- Mis padres me van a matar como llegue tarde.
- Bueno, quería pedirte perdón por mi comportamiento cuando he entrado a casa...
- Oh, no importa - le sonreí. Nos despedimos, me dió un beso en la mejilla y fui a donde estaba Savannah otra vez. Llegamos a casa, y me fui a dormir. No pude pegar ojo en toda la noche. Había sido un día demasiado añskldjfaklsdjfasdfklurebuioakjsdh para mí.

miércoles, 28 de julio de 2010

Capitulo 4

El siguiente día me desperté tarde. Me dolía un poco la espalda, pero no le di importancia. Desayuné sola. Mi padre bajó las escaleras y se acercó a mi.
- Cielo... tienes que arreglar las cosas con Savannah - dijo.
- ¿Cómo?
- Vete a pasar el día con ella al London Eye.
- Vale, como quieras... - no me apetecía mucho ir, pero acepté.
Subí a mi habitación a vestirme. Bajé y Savannah estaba en el salón, preparada para salir.
- Nelly, lo siento... - dijo de repente.
- ¿Qué? No, lo siento yo...
- No debí haberte gritado así. Y no debí haberte dicho eso sobre McFly... sé lo mucho que te importan, y entiendo que quisieras cumplir tu sueño - sonrió. La abrazé.
Salimos por la puerta y nos montamos en el autobus camino al London Eye.
- Nelly, sabes qué? Ayer estuve buscando fotos de McFly y son monos - dijo.
- ¿Enserio? - me reí.
- Sí, me gusta Harry.
- Jo, no sabes lo que me alegra saber que te gustan, aunque sea un poco - sonreí.
- Bueno, sólo me gusta su físico, las canciones no las he escuchado mucho...
Siempre había querido tener una amiga McFlyer. Parecía que lo estaba empezando a conseguir!
Cuando llegamos al London Eye, bajamos del autobus y fuimos a por un helado.
Entonces, vi algo. Alguien, mejor dicho. Tuve que frotarme los ojos.
- Savannah, Savannah! - susurré.
- ¿Qué...?
- Es Danny! - le dije intentando no gritar. Le teniamos a unos 20 metros. No me lo creía hasta que nos acercamos un poco más. Entonces ví que sí que era él. ''Amo Londres'', pensé en ese momento. Nos acercamos a él poco a poco. Iba con una gorra y con gafas, parecía que no quería que le reconociesen. Pero a mí no se me iba a escapar por muy disfrazado que fuera, há! Estaba con Georgia, su novia. Nos acercamos a él.
- Eem.. aah.. - no me salían las palabras, obvio.
- Quiere pedirte que te saques una foto con ella - dijo Savannah, intentando ayudarme.
- Oh, claro! ven aquí guapa - dijo mientras abría los brazos para que me acercase a él.
Me puse a su lado, me agarró del hombro y yo le cogí por la cintura. Oh dios, estaba pegada a Jones, a Danny Jones. Cuando sacó la foto, me tranquilizé y por fin pude hablar.
- Gracias, gracias de verdad - le dije mientras sonreía.
- De nada! ¿Cómo te llamas? - me preguntó.
- Nelly, y tu? ...pero qué estoy diciendo, como si no lo supiera... - me reí. Se rió.
- Qué graciosa, haha.
De repente, Savannah se empezó a marear. Estaba pálida, se sentía mal. Se sentó en un banco, mientras Danny la observaba.
- ¿Estás bien? - le preguntó. Qué majo, se preocupaba por alguien que acababa de conocer.
- No, me duele la cabeza, veo borroso y me estoy mareando... - contestó Savannah.
- Oh, enserio? Ven, te llevaremos a nuestra casa para que te vea Giovanna, que entiende de estas cosas - dijo Danny.
- No hace falta enserio, se me pasará...
- Naaah, veniros! además, seguro que a Nelly le gustará conocer al resto de los chicos - me guiñó un ojo y yo asentí.
¿Iba a ir a la casa en la que vivían mis cuatro chicos favoritos? Eso ya si que NO podía ser real. Pero lo era. Y yo, como siempre, no me lo podía creer. Intenté parecer lo más normal posible, no quería parecer una fan loca.
Nos metimos en su coche. Danny iba conduciendo, con Georgia a su lado (por cierto, una chica muy maja, no me la imaginaba así), y yo iba detrás con Savannah. Ella ya se sentía mejor, pero no dijo nada, sabía que yo me moría por ir a la casa de ellos. Danny puso música. ''This contagious chemistry is killing me...'' You Me At Six. Me encantaban. Cuando llegamos, ví a Harry en una ventana saludando. Salí del coche y le saludé muy sonriente. Seguramente se preguntaría qué haciamos nosotras en el coche de Danny. Entramos en la casa, Tom abrió la puerta.
- Hola!... ¿nuevas amigas, Danny? - preguntó mientras sonreía.
- Haha sí, son fans. Pero majas, eh? De las majas - Se rió.
- Oh, entonces las dejo pasar - Se rió y entramos adentro.
Harry bajó.
- Hola! he oído que sois fans... encantado de conoceros! - nos dijo mientras nos daba un abrazo a cada una.
Giovanna bajó y preguntó a Savannah qué tal se encontraba. Afortunadamente, se encontraba mucho mejor. Dougie no estaba.
- ¿Donde está Dougie...? - pregunté a Danny.
- Habrá ido a dar una vuelta, enseguida volverá, no te preocupes - sonrió.
Al de 15 minutos, Dougie entró por la puerta. Se me quedó mirando. Tenía los ojos como platos. Empezé a intimidarme, ¿por qué me miraba así? Me miraba como si ya me conociese o algo parecido. Sin desviar su mirada, subió a su habitación rapidamente. ¿Qué le pasaba? ¿Qué le había hecho yo? No entendía nada. Absolutamente nada.

Capitulo 3

El concierto fue espectacular. Cantaron canciones de todos sus CDs. Cuando acabó, salí a la calle. Todavía no me lo creía. Había sido demasiado perfecto como para ser creíble. Savannah no estaba, me envió un sms diciendome que había cogido el autobus para irse al apartamento. Decidí llamar a mis padres para que vinieran a recogerme, no me apetecía ir sola en el autobus a esas horas de la noche. Genial. No tenía saldo. Cogí mi monedero. No tenía dinero. Me había metido en un búen lío. Me senté en el banco que estaba enfrente del Wembley esperando a... ¿a qué? ¿a que de repente apareciera Danny en su coche ofreciendose para llevarme a casa? Nah, eso sólo pasaba en las películas. Eran las doce de la noche y ahí estaba yo, sola, en una calle en la que no pasaba nadie. De repente, apareció un coche. Pensé que podría ser alguno de los chicos, y me reí. Tenía que dejar de ser tan inocente, y poner los pies en la tierra. El coche se paró delante de mí. Me levanté extrañada. Alguien bajó del coche.
O________________O Dougie Poynter.
- Hey... ¿qué haces aquí a estas horas? Deberías irte a casa! - debió de saber que era fan de ellos, por mi camiseta, y por mi cara. Estaba pálida.
- Eem.. oh.. - no sabía qué decir.
Se rió. Dios, qué mono estaba cuando se reía.
- Venga, yo sólo soy el bajista, no soy importante, mira, incluso tengo un grano en la frente - me lo enseñó y yo no pude evitar reirme. Cuando por fin pude respirar, le contesté.
- No tengo dinero para el autobus, me he quedado sin saldo y no puedo llamar a mis padres... - le dije.
- Oh, y qué piensas hacer? Pasarte toda la noche aquí esperando a que aparezcan? Anda, ven, que te llevo.
Dougie me iba a llevar en su coche? Oh, eso ya si que no podía ser real.
De repente, me desperté. Estaba en un hospital. ¿Qué había pasado? No me acordaba de nada. Sólo me acordaba del concierto, y de mi extraño sueño con Dougie. Mi madre entró en la habitación.
- ¿Qué me ha pasado? - le dije inmediatamente.
- Que te desmayaste al final del concierto.
- ¿Sí?
- Si, un guardia te sacó y nos llamó.
- ¿Estais enfadados? - les dije.
- Sí, pero sobretodo Savannah, ¿cómo la pudiste abandonar de esa manera?
- Era McFly, mamá! Sabes que yo habría hecho lo que fuera por verles y...
- Anda, calla y descansa, ya hablaremos de eso cuando vayamos a casa.
Se fué.
Me puse a pensar. El sueño con Dougie había sido tan real... tan real que juraría que había sido cierto. Pero bueno, esas cosas nunca pasaban en la vida real, y lo sabía. Ese mismo día por la tarde, me dieron el alta, y nos fuimos a casa. Savannah no me hablaba, y mis padres seguían enfadados. Subí a mi habitación y me puse a escuchar música. Me puse a pensar en el concierto. Hubo un momento en el que Tom me miró, y cuando Harry tiró una baqueta al final del concierto, por poco la cojo. Esperad. ¿Al final del concierto? Yo me desmayé antes de que acabara... oh, seguro que eso también formaba parte de mi sueño. En fin, mi vida era un poco rara en ese momento: Mis padres y mi mejor amiga estaban enfadados conmigo, estabamos en Londres, y había estado en un concierto de McFly, en el cual me había desmayado... y las vacaciones sólo acaban de empezar.

martes, 27 de julio de 2010

Capitulo 2

Me desperté. Lo primero que me vino a la cabeza fue ''Hoy es el día''. Estaba nerviosa, nerviosísima. No sabía lo que iba a pasar ese día. Me levanté y bajé las escaleras mientras escuchaba música. ''Maybe it's not my weekend, but it's gonna be my year...''. Mis padres estaban desayunando.
- Buenos días! - dije.
- Buenos días, preciosa! - dijeron sonrientes.
- ¿Qué vais a hacer hoy?
- Pues supongo que iremos a visitar el Big Ben con tu hermano. ¿Qué vais a hacer vosotras?
- Vamos a ir a la zona del Wembley.
- ¿Qué hay ahí pues?
- Nada, simplemente lo que llevo esperando 4 años... - me salió del alma.
- ¿Qué? - preguntaron extrañados.
- Nada, nada... - en ese momento bajó Savannah.
- No hagais locuras, eh! - dijeron.
- No, tranquilos, estaremos bien - dijimos las dos.
Desayunamos y subimos a la habitación. Me vestí. Una camiseta en la que ponía ''Lies, lies, lies'' (perfecta para la ocasión), unos pitillos y mis converse negras. El día más raro de mi vida acababa de empezar. Era raro para mí pensar que tenía alguna posibilidad de verles... tanto tiempo esperando ese momento, que parecía imposible que ocurriera. Era irreal, muy irreal. Prefería no hacerme ilusiones, porque no iba a ser fácil, pero si persigues los sueños, se cumplen, no? pues eso estaba dispuesta a hacer yo.
3pm. Savannah y yo estabamos en el autobús, camino a Wembley. Yo me mordía las uñas. Tenía miedo. No sabía cual iba a ser la reacción de Savannah al saber por qué ibamos a ir a Wembley... estaba deseando que no se comportara como una inmadura, si no como una amiga de verdad. Llegamos, el autobús nos dejó a dos manzanas de mi destino. Se oían gritos de chicas de vez en cuando. Savannah empezó a sospechar.
- ¿Tienes idea de qué pasa...? - preguntó.
- ¿A que te refieres?
- A los gritos que se oyen, de fans histéricas.
- Ah, no, no sé... - yo no sabía mentir, y ella lo sabía.
- Nelly, mientes.
No contesté, y cambié de tema.
- Pff, hace mucho calor... ¿entramos al Starbucks? - dije.
- Vale!
Estuvimos en el Starbucks toda la tarde, nos encantaba. Aquel día estaba demasiado nerviosa como para estar relajada. Tuve que ir al baño unas cuantas veces, siempre me pasaba lo mismo cuando estaba nerviosa. De repente miré el reloj: 7:45pm. El concierto empezaba en 15 minutos. No tenía otra opción, tenía que decirselo ya.
- Savannah... - miré al suelo.
- ¿Qué? ¿Qué pasa? ¡Sabía que pasaba algo! te lo llevaba notando todo el día, venga, sueltalo ya!
- Mira... hay un concierto de... bueno... McFly, en el Wembley, en 15 minutos... es gratis y...
- No! Nelly, hemos venido a Londres para pasar unas vacaciones juntas, no para ver a cuatro estúpidos tocando canciones sin sentido con sus absurdas guitarras! - gritó.
Eso me dolió. Me dolió mucho. Sin pensarmelo dos veces, salí del Starbucks corriendo. Empezé a correr hacia el Wembley, en ese momento me daba igual todo. Tenía que entrar. Tenía que vivir ese concierto. Cruzé la calle y, ahí estaba, el Wembley. Había un cartel gigante en el que ponía ''McFly en concierto''. Miré hacia atrás, pero Savannah no me había seguido. 7:55pm. Sólo me quedaban cinco minutos.
Me acerqué a la puerta principal.
- Perdona, señorita, el aforo está lleno y no puedes entrar. - me dijo el guardia que estaba en la puerta.
Ya sabía yo que algo tenía que salir mal. No me puse a llorar, quería parecer una chica madura. De repente, se escucharon gritos que venían de adentro... y una voz. ''Here's another song for the radio...!'' Oh dios, era Tom. Tom Fletcher. No me lo podía creer, le estaba oyendo. Estaba a metros de ellos, pero no podía verles. Me senté en un banco que había al lado de la puerta. Al de un minuto, salió otro guardia con una chica en brazos. Se había desmayado y la habían sacado. El guardia me miró, y sonrió.
- Has tenido suerte, maja, ahora puedes entrar! - me dijo.
No me lo podía creer. Lo había conseguido. No, no, no. No podía ser verdad. Sin pensarmelo dos veces, abrazé al guardia y entré corriendo. Iba por los pasillos del Wembley, buscando la entrada, cada vez escuchaba sus voces más cerca. Estaba emocionada, no pude aguantar más y me salieron algunas lágrimas. Entonces, ví una puerta abierta a lo lejos. Salían luces. Esa debía de ser la puerta. Me acerqué poco a poco, la abrí y... efectivamente. Ahí estaban. Después de cuatro años esperando ese momento, lo había conseguido, les tenía a unos 30 metros de mí. Sonreí como nunca lo había hecho. Mis lágrimas no dejaron de caer en todo el concierto. Mi sueño se había hecho realidad. El mejor día de mi vida.

Capitulo 1

Ahi estabamos. Savannah, mis padres, mi hermano y yo, en el aeropuerto. A penas llevabamos 5 minutos en Londres y yo ya me había enamorado de la ciudad. Los chicos que estaban por el aeropuerto eran guapísimos (qué buen comienzo..!), me enamoré de absolutamente todos. Cogimos un taxi y fuimos camino a nuestro apartamento.
- Mira, Savannah, es el Wembley! - grité al verlo.
- Y..? qué pasa..? - preguntó ella sorprendida.
- Que McFly ha tocado ahí muchas veces! - dije mientras sacaba fotos.
- Nelly, como te pases todas las vacaciones hablando de McFly, juro que me cojo un avión y me vuelvo a Bilbao, eh!
- Jo, compréndeme, saber que estoy a kilómetros de ellos me altera! - dije riendome.
- Venga tía, llevas hablandome de ellos desde 2006, por favor, podrías estar un simple mes sin mencionarles? - suplicó.
- Sabes que no podría... - le abrazé y le canté el estribillo de ''Five colours in her hair'', para hacerla rabiar.
Sí, Savannah era mi mejor amiga, pero no soportaba a McFly. Bueno, no soportaba que yo hablara tanto de ellos. Era lo único malo de ella. A pesar de todo, la quería y me gustaba hacerla rabiar de vez en cuando.
- Hemos llegado! - dijo mi padre mientras aparcaba al lado de nuestro apartamento.
- Bieeeeeen! - gritamos Savannah y yo a la vez.
Fuimos rapidamente a nuestra habitación, dejamos las maletas, y nos sentamos en el sofá a ver la tele. Estabamos agotadas por el viaje, necesitabamos descansar.
De repente, salieron ellos en la tele. Savannah se fué al baño para no verles mientras yo me reía de ella. La conocía demasiado, y sabía que si les conociese mejor, también sería fan de ellos... pero ni lo intentaba.
''...Mañana, a las 8:00pm, McFly dará un concierto gratis en el Wembley, el cual prometen que será inolvidable...'' O_O
Oh, yo tenía que estar ahí. Llevaba siguiendoles desde hace mucho y me merecía un concierto de ellos. Pero mis padres no me dejarían ir sola, y lo último que haría Savannah sería acompañarme...
- Nelly! Ha acabado ya el anuncio de esos? - gritó Savannah desde el baño.
- Si, boba!
- Más vale que no vuelvan a salir... - dijo mientras suspiraba.
- ¿Qué te parece si vamos mañana a dar una vuelta por las afueras de Wembley?
- ¿Wembley? ¿Estás en Londres y en vez de ir a ver el Big Ben o el London Eye... quieres ir a ver el Wembley? No te entiendo.
- Oye! Que por las afueras del Wembley hay cosas muy bonitas que podemos visitar! - no tenía ni idea de lo que decía, pero tenía que hacer lo que sea por estar en ese concierto.
- Vale, pero prometeme que me dejaras organizar a mi el siguiente plan!
- De acuerdo!
Me fuí a la cama. Tenía mucho sueño. Cogí mi iPod y me puse a escuchar un poco de música. ''It's all about you... it's all about you, baby...''. Tenía que hacer lo que fuera posible para estar en ese concierto, y no iba a ser fácil... pero lo tenía que conseguir. Al fin y al cabo, todo giraba alrededor de ellos, absolutamente todo.

Introducción

No me lo podía creer. Por fin mis padres habían accedido a llevarme a Londres... ¡por fin! Llevaba siglos esperando aquel momento. Esa noche a penas pude pegar ojo, estaba demasiado nerviosa. Ibamos a ir todo el mes de Diciembre, no mucho tiempo, pero lo justo para poder pasar las mejores vacaciones de toda mi vida. Mi amiga Savannah también se vendría con nosotros. Todo era perfecto. Lo tenía todo planeado, o bueno, casi todo. Íba a visitar muchísimos lugares, incluso hice una lista para no olvidarlos. Todo era genial, increíble. La noche anterior era la chica más feliz en todo el universo. Pero la verdadera razón por la que yo quería ir a Londres, era para estar cerca de ellos.