viernes, 13 de agosto de 2010

Capitulo 24

El siguiente día ibamos a irnos de fiesta, teníamos que celebrar que Ashton ya no estaba en nuestras vidas. Me desperté por culpa de un sms. Era de Georgia.
''Nelly... sé que has oido una voz de tío cuando hemos hablado por teléfono... por favor, no se lo digas a Danny.''
¿Qué? No, no, no, no. Georgia le estaba poniendo los cuernos? Tss, eso se lo tenía que decir a Danny. Fuimos todos a desayunar. Danny y Natalia no paraban de sonreirse entre ellos. Uy, uy, uy. Cuando acabamos de desayunar, le hize un gesto a Danny para que se acercara.
- ¿Qué pasa? - preguntó extrañado.
- Tengo que decirte algo. Vamos arriba.
Subimos a su cuarto. Nos sentamos en la cama.
- Ayer hablé con Georgia... y escuché una voz de tío detrás de ella. Y hoy, me ha mandado un sms diciendo que no te diga nada... lo siento, Danny, pero me he visto obligada a decirtelo. No está de vacaciones con su hermana - miré hacia otra parte. Empezó a reirse. Yo no entendía nada.
- ¿Qué? ¿Qué pasa? - pregunté mientras él, poco a poco, conseguía contagiarme su risa contagiosa.
- Que yo también le estoy poniendo los cuernos - no pude evitar soltar una carcajada. Joder, Danny Jones era una caja de sorpresas.
- No jodas! ¿Con quién? ¿Como? ¿Cuando? ¿Donde? - pregunté mientras seguíamos riendonos.
- Aaaaaaaaaaaaah... eso lo tendrás que averiguar tú.
- Malo. Tss, dímelo! - le dije mientras le pegaba con la almohada.
- Pronto lo sabrás, baby - estaba loco. Pero Danny sin sus locuras... no era él.
Salí de la habitación y fui a donde Natalia, que estaba viendo la tele. Me senté a su lado.
- ¿Qué tal tu primer día en la McCasa? - le pregunté.
- Genial. Más que genial. No sabes tú quééééé bien! - dijo con una sonrisa de oreja a oreja.
- Tú te has tirado a Danny, o algo así, no es normal tanta felicidad. - se empezó a reir.
- Naaah, boba - dijo entre risas.
- Menos mal, porque Danny nos prometió un trío a Doug y a mí... - entonces apareció Danny.
- Bueno, podríamos dejar el trío para otro día y hacer un cuarteto... - dijo mientras nos abrazaba por detrás. Natalia y yo le pegamos una colleja mientras nos reíamos.
Después de comer, fuimos a prepararnos para irnos de fiesta. Natalia y yo nos pusimos un vestido normal y corriente, nada de otro mundo. Bajamos al salón, donde estaban los chicos y Gio, esperandonos.
- Me corro, pleaseeeeeeeeeeeeeeee! - dijeron Danny y Dougie cuando nos vieron. Natalia y yo no pudimos evitarlo, y empezamos a reirnos como tontas. Cuando se nos pasó el ataque de risa, subimos al coche, y fuimos a la discoteca más cercana. Había paparazzis, pero actuamos con normalidad. Al fin y al cabo, sólo eramos siete personas normales y corrientes, con ganas de divertirse.

No hay comentarios:

Publicar un comentario