viernes, 13 de agosto de 2010

Capitulo 25

Nos sentamos en una mesa, los siete. Harry conoció a una chica en la pista de baile... parecía muy maja, se sentó con nosotros. Estuvimos un buen rato, hablando y riendo.
- Tengo que deciros algo... - dijo Danny.
- ¿Qué? - preguntamos todos a la vez.
- Georgia y yo hemos cortado... hace media hora exactamente. - nos quedamos todos callados. Yo lo veía venir, pero bueno.
- ¿Por qué lo habéis dejado? - preguntó Tom.
- Porque me estaba poniendo los cuernos con otro tío.
- The Kinky Bitch... - dijo Harry. En ese momento, explotamos. Sobretodo Natalia y yo. Ay dios, qué risa. No podíamos parar. Judd era Dios. Consiguió que todos nos murieramos de la risa. Cuando paramos de reirnos, salimos a la pista de baile. Yo estaba con Doug, Tom con Gio, Harry con Stacey (la chica que había conocido), y Danny con Natalia.
- Mirales, mira como se miran - me dijo Dougie mientras miraba a Dan y a Natalia.
- Están hechos el uno para el otro - dije mientras Natalia nos miraba y nos guiñaba un ojo.
- Por eso a Danny no le ha importado cortar con Georgia - me dijo mientras se acercaba para besarme.
- Exacto - le sonreí y nos sumergimos en un profundo beso.
Cuando la fiesta terminó, nos montamos en el coche rumbo a casa. Al llegar, Danny se fue a la ducha. Yo estaba en mi habitación, hablando con Dougie. Entró Natalia.
- ¿Sabéis si la ducha está libre? - yo sabía que no, pero decidí darle un regalito.
- Sí, está libre, entra y disfruta - Natalia se fue. Empezé a reirme.
- ¿Por qué te ries? - me preguntó Doug.
- Porque está Danny adentro... ¿a que soy una buena amiga? - y empezamos a reirnos los dos.
Ya eran las 2 de la madrugada, asi que decidimos irnos a dormir. Como siempre, una cama estaba vacía, no nos hacía falta. Al de media hora, alguien abrió la puerta de nuestra habitación cuidadosamente. Era Danny. Se acercó a Dougie silenciosamente, y le preguntó algo. Se lo dijo a susurros, asi que no le pude escuchar. Dougie le dijo que sí, y le dió algo a la mano.
- ¿Qué te ha preguntado? - le dije extrañada.
- Que a ver si tenía condones, que le hacían falta - y empezé a descojonarme.

No hay comentarios:

Publicar un comentario